Los vecinos del mismo, que ocupa cuatro manzanas se siente abandonados y con promesas incumplidas

El Barrio Coll, de la ciudad de Bragado, ubicado sobre uno de los costados del acceso Bernardo de Elizondo, sin temor a equivocarnos, es una de las barriadas más dejada de lado. No solamente por la actual gestión de gobierno, que encabeza Vicente Gatica, sino que gestiones anteriores, tanto como la de Aldo San Pedro y el mismo Orlando Costa, poco hicieron por los vecinos que habitan en este barrio, hecho por don Jaime Coll.

 Los vecinos han comenzado a presentar sus quejas, sabemos que en el mes de octubre del año 2018, se hizo una reunión entre gente del barrio y autoridades municipales, en la que estuvieron presentes, entre otros, el Secretario de Obras Públicas, Ing. Fabio Bollini y el director de Relaciones Institucionales de la Municipalidad Aldo Lingeri.
 Una de las vecinas, Karina Favale expresó a nuestro diario que cuando se fue a vivir al mismo, llegó a pensar que «sería el mejor sitio para vivir, y lamentablemente el abandono al que ha sido sometido el barrio, causa mucha tristeza…»
 Agregó que «las calles con sus pozos que parecen grandes piletones, los pastos altos,las zanjas que abrieron al costado de la plaza con la promesa de mejorar el desagüe y las calles, me hace pensar que ha dejado de ser ese lugar ideal para vivir.
 
«Las montañas de tierra se llenaron de pastos altos, las luces de la plaza se cortaron, al lado de la zanja que hicieron,quedó un gran pino,cuyas raíces poco profundas y ya sin tierra de un lado, hacen que el viento lo mueva para todos lados,con el peligro que esto significa.
 Además, se expresó la preocupación por el Corralón de materiales, ubicado frente al barrio, por calle Gelsomino, del cual vuela arena y otros elementos y no tiene, dicha empresa, ninguna valla protectora que evite la molestia a los vecinos.
 El hecho de haberse colocado semáforos en Elizondo y Combate de San Lorenzo, muchos conductores de vehículos, lo esquivan, tomando Segunda Elizondo entre Gelsomino y Combate de San Lorenzo y convirtiendo dicha cuadra, prácticamente en un auto pista, y con todo el riesgo que esto implica.
 «Podía seguir enumerando cosas,pero …basta con ver las fotos.Igual tenemos la esperanza de que algún Gobierno, alguna vez nos escuche…», dijo Karina Favale.
 «Somos pocos, sólo cuatro manzanas. Tal vez no signifiquemos un gran número de votos. Lástima…».