– Dialogamos con Claudia Barrozo, quien habló de la tarea que llevan a cabo estos trabajadores de la salud

 Maria Claudia Barrozo, es una de las acompañantes terapéuticas que hoy tiene la ciudad de Bragado y cursó la carrera en la ciudad de Chivilcoy en el Instituto HUMUS.  

 También, en la actualidad, cursa el 2do año de la tecnicatura en Acompañamiento Terapéutico  en UNSADA  extensión Bragado

 Los acompañantes terapéuticos cumplen una función muy importante en la sociedad, son profesionales de la salud mental y de una importancia singular para muchas personas que requieren de este tipo de profesionales y aún en tiempos de pandemia como le toca vivir a la sociedad toda.

Claudia Barrozo, fue entrevistada por nuestro medio y habló sobre distintos puntos que engloba su profesión.

 Comenzó explicando que «el acompañamiento terapéutico surge en la década del 60 , período en el que se gestaban los movimientos anti psiquiátricos  y anti manicomiales en respuesta a la estigmatización social, aislamiento y cosificación  del enfermo mental…»

 Ante el interrogante de cómo acompañar estos procesos terapéuticos, indicó que  surge como disparador en 1970 de la mano del Dr. Eduardo Kalinas ( médico especialista en psiquiatría, graduado en la UBA), el llamado “ Amigo calificado”  quién acompañaría a estos pacientes, con el tiempo se lo llama Acompañante terapéutico.

LA FUNCION DEL ACOMPAÑANTE TERAPEUTICO

 Más adelante, Claudia Barrozo se refirió a la función del Acompañante Terapéutico indicando que La función confluye como dispositivo que trabaja en triangulación entre  familia-profesional de la salud y paciente, sosteniendo la continuidad del tratamiento de forma ambulatoria en casos de patologías graves o crisis psicóticas, esquizofrénicas, así como también en trastornos graves o severos, TOC, TGDH, DE CONDUCTA, ADICCIONES, entre otras…

 «Generalmente somos convocados por un profesional ante la demanda del paciente o la familia aunque en algunos casos también puede ser el paciente mismo quien nos convoque , según el cuadro  (la patología) se arma un dispositivo para poner en marcha el tratamiento, donde los AT debemos siempre  ser supervisados por un profesional o lo que es más correcto, un equipo de profesionales, se trabaja en red conjuntamente con la familia o entorno cercano al paciente, brindándole herramientas de apoyo que logren la mayor autonomía posible en el mismo. 

DURACION DE LOS ACOMPAÑAMIENTOS  

 En cuanto a la duración de los acompañamientos, nuestra entrevistada dijo que «tiene un tiempo de duración generalmente, debemos tratar de no hacerlo crónico, por el paciente y por nosotros mismos., somos trabajadores en el campo de la salud mental aunque al no tener una ley que nos regule, no estamos siendo considerados formalmente, las obras sociales nos consideran  prestadores de servicios, lo que hace que nos precaricen todo el tiempo y se confunda nuestro rol , existe una demora de 8 meses, en algunos casos más, en recibir los pagos por ejemplo de   IOMA  que es la obra social que más demanda terapéutica ofrece hoy y los pacientes de manera particular muchas veces no pueden solventar el tratamiento.

 «Los AT nunca abandonamos un paciente, aún en pandemia hemos articulado con los equipos y las familias, la manera de seguir acompañando, ya sea por llamados telefónicos, video llamadas, correo electrónico y en casos extremos con un protocolo especial prosiguió el acompañamiento presencial, ya que hay pacientes que así lo requieren, el AT trabaja principalmente con la palabra alojando el padecimiento del enfermo lo que hace que el vínculo no deba ser interrumpido…».

«ACOMPAÑAR ES UN ARTE»

 «Acompañar es un arte, cada encuentro que se produce con el paciente es un nuevo espacio creado para gestar algo, un lazo, un vínculo que de forma recíproca me devuelve algo inesperado, en un acompañamiento se aprende muchísimo, ninguno es igual, aunque la patología sea la misma , cada historia ofrece un sinfín de información que se convierte en aprendizaje…», comentó Claudia Barrozo.

«Un AT debe ofrecer una escucha amable, un espacio donde juegan las emociones habladas y los silencios, donde la observación, la mirada juega relevancia, debemos  intervenir  sin invadir y donde la espera, la entrega y el tiempo que ofrecemos son herramientas fundamentales!! .. el plan de trabajo teórico nunca coincide con la práctica porque cada encuentro es quien determina la estrategia, la dinámica de nuestro trabajo, un tratamiento nunca es estático…».

«En este proceso pandémico que nos atraviesa  queda claramente  expuesto, lo relegada que esta la salud mental en el mundo, en cuánto a materia de   práctica, desde niños a adultos mayores se incremento la angustia, la depresión, el miedo a soledad, ansiedad, estrés etc..  emocionalmente  nos quedamos sin recursos ante la incertidumbre de un posible  mañana, para intervenir hoy en día es importante desarrollar métodos y destrezas nuevas, el padecimiento humano va cambiando a medida que pasa el tiempo y nos obliga a pulir mecanismos nuevos , lo constituyente  arrasa lo constituido y cotidianamente  todo se transforma, aprendimos a transitar  al lado del paciente con nuevos tiempos, nuevas formas.. inclusive  detrás de una pantalla, pero aún queda mucho camino por andar, La ley de salud mental 26657 hace mención al acompañamiento del enfermo pero no nos contempla como Acompañantes terapéuticos.

CREANDO LAZOS

 Le preguntamos a nuestra entrevistada que es «Creando Lazos» a lo que respondió que «es un espacio pensado  para adultos mayores donde ellos mismos cobran protagonismo y participan estimulando  todas las áreas , recreativas, cognitivas, motriz , llevando su creatividad al máximo, y sociabilizando que es primordial en esa etapa»

El grupo de «Acción para el Desarrollo», a quienes agradecemos, generosamente nos ceden su espacio físico donde se llevan a cabo los encuentros semanales, desde hace ya 3 años ., aunque  este año no pudimos comenzar, esperamos el año próximo retomar los encuentros con muchas actividades y participantes nuevos .