En la historia reciente del Concejo Deliberante de Bragado, hay nombres que dejaron una huella profunda por su estilo, compromiso y coherencia. Uno de ellos es el doctor Fernando Neri, concejal (MC) y referente indiscutido de una forma seria y transparente de hacer política. Aunque hoy se encuentra alejado de la militancia activa y sin pertenencia a un partido político, su voz sigue teniendo peso en la opinión pública local.

Durante su paso por el Concejo Deliberante, Neri se destacó por su postura firme, su claridad conceptual y una ética política que lo diferenció del oportunismo habitual. Representando al espacio Acción para el Desarrollo, fue parte de una dupla recordada junto a la doctora Marita Gelitti. Juntos protagonizaron intensos debates legislativos que, en más de una ocasión, pusieron en aprietos al oficialismo de Aldo San Pedro, cuando eran oposición, y defendieron con la misma vehemencia la gestión de Vicente Gatica cuando les tocó ser oficialismo.

No fue un dirigente que se escondiera en los momentos difíciles. En 2011, en una etapa compleja para la Unión Cívica Radical, cuando muchos referentes del partido se mantenían al margen, Neri aceptó el desafío de ser candidato a intendente. Lo hizo con plena conciencia de que enfrentaba a un San Pedro en pleno auge, y que la derrota era probable. Sin embargo, su compromiso con los valores democráticos y con la representación de una alternativa seria lo llevó a asumir esa responsabilidad con hidalguía.

Hoy, Fernando Neri no milita en ningún espacio político, aunque sigue de cerca la realidad local. Afirma con convicción que se puede hacer política sin necesidad de integrar un partido. Su cuenta de Facebook se ha convertido en una plataforma donde vuelca análisis y reflexiones que no pasan desapercibidos. De hecho, su última publicación generó tal impacto que varios medios locales decidieron reproducirla.

En ese análisis, Neri no dudó en poner el foco sobre el actual escenario político bragadense, al que calificó como “una especie de conventillo”, donde las disputas personalistas y el ego de algunos dirigentes opacan lo verdaderamente importante: las decisiones de fondo que pueden mejorar la vida de los vecinos. No obstante, también rescató que existen dirigentes con ideas y buenas intenciones, que merecen ser escuchados por encima del ruido de la confrontación estéril.

Consultado sobre un eventual regreso a la política activa, el doctor Neri fue categórico: por el momento, no tiene intenciones de volver a ocupar cargos públicos, a pesar de haber recibido propuestas concretas de distintos espacios. “No es tiempo de volver, aunque siempre estoy dispuesto a aportar desde el análisis y el debate respetuoso”, ha dicho.

Fernando Neri es, sin dudas, uno de esos hombres que la política valora incluso en silencio. Su formación, su capacidad de análisis, su espíritu democrático y su honestidad intelectual lo convierten en una figura que cualquier espacio querría tener en sus filas. Pero, más allá de las etiquetas partidarias, lo que lo define es su integridad. Y eso, en tiempos de tanta confusión política, sigue siendo su mejor carta de presentación.