En Bragado se concretó en la jornada del jueves un encuentro entre los concejales actuales y los nuevos electos, un gesto que, más allá de lo simbólico, podría tener un impacto concreto en la vida institucional del Concejo Deliberante.

El objetivo de esta reunión fuepropiciar una transición ordenada, en la que los representantes que dejan sus bancas transmitan a los entrantes el estado de situación de los proyectos en marcha, las prioridades legislativas y las dinámicas de trabajo que se vienen desarrollando.

Impulsar nuevos caminos para debatir los temas que la sociedad necesita fue otro de los sentidos de la transición en el Honorable Concejo Deliberante de Bragado, que ya fue iniciada.

Más allá de las diferencias partidarias, hay una coincidencia en que temas sensibles para la comunidad —como la salud, la educación, la obra pública y la seguridad— requieren continuidad y acuerdos básicos. En ese marco, un primer acercamiento sirvió para instalar un clima de diálogo y consensos, fundamental en un cuerpo deliberativo donde la nueva etapa necesitará de consensos, puesto que el oficialismo ha perdido la mayoría absoluta.

La experiencia de los concejales con más años de trabajo se volvería un aporte valioso para quienes recién asumen, mientras que las nuevas voces aportarían energía y miradas renovadas que podrían enriquecer la agenda política local.

Además, el gesto de unidad enviaría un mensaje fuerte hacia la sociedad: que los representantes están dispuestos a trabajar en conjunto, priorizando el bienestar de los vecinos por encima de las disputas partidarias.

Esta reunión marcó el inicio de una nueva etapa en el HCD, como también tiene el significado de un ejemplo de madurez política en tiempos donde la ciudadanía reclama más diálogo y menos confrontación.

De la reunión participaron Paola Alsina, Carla Bruno, Pilar Vives, Emma Elizalde y los actuales ediles Mauricio Yaffaldano, Fernando Franzoni, y Daniela Monzón.